Mario Fanon Wiki
Advertisement

Resumen[]

Este es el verdadero día del combate final. El Gran Hermano Martillo no piensa perder una batalla más. Quiere terminar la guerra de una vez por todas. ¿Conseguirá hacerse con el control del castillo y derrocar a Bowser o por lo contrario nuestros protagonistas idearán algo para pararle los pies?

[]

[]

Intro LTS Temp.5. Blooper

(Un día en el Castillo de Bowser por la mañana, todo está tranquilo. Demasiado tranquilo. En la sala de reuniones del castillo se encuentran Kamek, Bowser, Ratónito, el Trío de Élite, Bombazulina, Spiriny, Robert y Goombi. Kamek y Bowser se encuentran sentados en la plataforma alta del final de la sala)

- Kamek. Amigos, compañeros... Esta es la primera vez en los más de cien años que tiene el castillo que este se queda tan vacío como ahora. Sólo quedamos en él los que estamos aquí reunidos.

- Ratónito. Hombre, era normal que pasara después de lo que ha ocurrido.

- Kamek. Al menos me reconforta saber que aún los que estamos aquí permanecemos porque le tenemos mucho cariño al castillo y al resto de nuestros compañeros. ¿No es así?

- Bowser. Yo estoy aquí porque guardo todo mi dinero en el sótano. Nada más.

- Ratónito. Yo estoy porque no tengo otro sitio al que ir.

- Guydo. Ratónito, tienes a tus padres...

- Ratónito. Puf, prefiero quedarme aquí, gracias.

- Bombazulina. Yo estoy aquí por el Recluta Goombilón. Nunca más nos separaremos... (se besan)

- Robert. Yo estoy aquí porque no me dejáis irme.

- Spiriny. Y yo estoy aquí porque no sé qué está pasando en este castillo.

- Ratónito. Spiriny, el Gran Hermano Martillo ha vuelto a contraatacar y va a intentar matar a todos los que permanezcan en este castillo. Por eso todos se han ido menos nosotros.

- Spiriny. ¡Ostras! ¡¿Y por qué nadie me lo ha dicho?! Me voy a hacer las maletas. (Spiriny sale de la sala. Kamek mira a Ratónito furioso)

- Kamek. Porque necesitamos cuantos más trabajadores aquí mejor, que si no te echaba del castillo a patadas...

- Ratónito. Oye, yo sólo intentaba ayudar...

- Guydo. Kamek, ¿tú conoces la historia del castillo?

- Kamek. Sí. Me he leído todo los libros de historia sobre él. Parece ser que hace unos 120 años, un conde muy rico ordenó construir un castillo para descansar en el Reino Champiñón cuando viniera aquí de vacaciones. La construcción tardó aproximadamente 3 años en acabarse. Pocas semanas después de ello, el conde enfermó gravemente y murió varias semanas después. Como no tenía familia, el heredero de ese castillo fue el abuelo de nuestro actual amo Bowser. La cabeza de piedra que adorna el castillo es del abuelo, pero está claro que nuestro amo es parecidísimo.

- Goombilón. Ya es mala suerte morirse después de haberse gastado un dineral en un castillo como este.

- Paratroopi. Y después de esta lección de historia tan interesante, ¿qué vamos a hacer para sobrevivir al ataque inminente del Gran Hermano Martillo?

- Kamek. Maldita sea. Con los pocos que somos no vamos a poder hacer nada...

- Ratónito. (Pensativo) ¿No os dáis cuenta de que el Gran Hermano Martillo está consiguiendo lo que se propone? (Todos miran a Ratónito) Hay un dicho que dice: “Divide y vencerás”. Y él ya casi lo ha hecho. Usando el miedo y las amenazas nos ha dejado solos.

- Kamek. ¿Y tienes algún plan, o vas a dejar que muramos todos?

- Ratónito. Tengo dos planes. Solo os contaré el primero, a ver si funciona. ¿No pretende ese loco que la gente abandone el castillo para entrar él y apoderarse de él? (Todos asienten) Pues tenemos que hacerle creer que nada ha cambiado, que nadie se ha asustado y se ha ido.

- Bombazulina. ¿Y cómo pretendes conseguirlo?

- Ratónito. Por la noche vamos a organizar una fiesta muy chula. Y en una de las habitaciones que de a la fachada del castillo, que nos vean que seguimos estando en él los mismos.

- Kamek. ¡Claro! ¡Una especie de señuelo! Buena idea, Ratónito. Ahora me voy a poner a llamar a gente que conozca... (llama alguien a la puerta de la sala de reuniones) ¡Pase! (Entra Kammy) ¡¿Madre?!

- Kammy. Sí, soy yo, hijo. Si te preguntas qué hago aquí, la respuesta es que me lo he pensado mejor y tengo que estar a tu lado en estos momentos tan duros... (saca de detrás suya una maleta) ¡Vuelvo a quedarme unos días en tu casa! ¿No es genial?

- Kamek. (Le susurra al oído a Bowser) No me lo puedo creer... Ni un loco que nos amenaza es capaz de sacarla de este castillo...

- Bowser. Yo ya he perdido toda esperanza de que se vaya de una vez por todas...


Diálogo[]

(Todavía, en la sala de reunions del castillo se encuentran todos los que quedan, menos Kammy y Goombi, que están en la habitación de Kamek. En la sala de reuniones están todos esperando algo)

- Goombilón. Kamek, ¿qué se supone que estamos haciendo aquí todavía?

- Kamek. (Cogiendo el móvil para empezar a llamar. Aún no ha marcado ningún número) Verás, es que he contratado a un guardaespaldas por si aparece de repente el Gran Hermano Martillo.

- Guydo. ¿Y quién va a pagar eso?

- Kamek. Pues todos nosotros, por supuesto.

- Todos. ¡¿Qué?!

- Kamek. Oye, que como ha dicho Ratónito necesitamos más personas por aquí. Además, sólo se quedará unos días hasta que pase el peligro.

- Robert. ¿Le has hecho un contrato de trabajo temporal?

- Kamek. ¿Contrato? Jajajaja. Tonterías. Si cumple con su trabajo recibe el dinero. Si no, le sacamos fuera del castillo.

- Paratroopi. ¿Y quién es el famoso guardaespaldas?

- Kamek. (Mira a su derecha y ve cómo se abre una puerta) Ah, ya debe de haber llegado. Todos un alegre recibimiento para... (el guardaespaldas va entrando) ¡Basilix! (Todo el mundo pone cara de sorpresa y de susto a la vez. El Trío de Élite tiene unas caras más expresivas que el resto)

- Trío de Élite. ¡¡¿Pero qué?!!

- Guydo. Ostras, esto no me lo puedo creer.

- Goombilón. Vamos a morir los tres...

- Paratroopi. Kamek, ¡¿cómo se te ocurre coger a este tipo?!

- Kamek. (Hablando en tono bajo para que Basilix no le escuche) ¡¡Shhhh!! ¡Callaos, idiotas! Le he hecho varias pruebas y no recuerda nada de lo sucedido anteriormente. (Ratónito se empieza a reir al ver a Basilix)

- Ratónito. Esto cada vez se hace más gracioso.

- Basilix. (Subido en la plataforma, mirando a los secuaces de Bowser) Buenos días. Me han contado que hay una amenaza que afecta a este castillo y he sido contratado para defenderlo con mi vida si hace falta. Espero llevarme bien con todos ustedes mientras esté aquí. Mi nombre es Basilix.

- Ratónito. (Le pone una mano en el hombro de Basilix) Tío, ten cuidado al bajar las escaleras o al asomarte por la ventana, que las caídas son muy malas... (sigue riéndose)

- Basilix. (Mira detenidamente al Trío de Élite) Hmmm... Me suenan vuestras caras... (el Trío de Élite palidece) ¿Nos hemos visto alguna vez?

- Guydo. No... No lo creo...

- Goombilón. Nos acordaríamos... Digo yo...

- Basilix. ¿Cúales son vuestros nombres?

- Paratroopi. Yo soy... Eh... Korokoopa Blantuga, encantado.

- Goombilón. Yo... Goombulote.

- Guydo. Y yo Don Huesito.

- Basilix. Hmmm... Vuestros nombres no me suenan... En fin, habrá sido un malentendido.

- Kamek. Por motivos de seguridad, es conveniente que permanezcamos unidos y que sólo salgamos en caso de emergencia. Yo me tengo que ir a vigilar a mi madre.

- Ratónito. ¿Acaso no dijiste “en caso de emergencia”? ¿Para qué sales?

- Kamek. Ya, pero ya conoces a mi madre. Puede causarle a Goombi daños irreversibles... (Desaparece mágicamente)

_______________________________________________________________

(En la habitación de Kamek, se encuentran Kammy y Goombi. Kammy viene con un cuenco con puré en mano)

- Kammy. Niño, aquí tienes el desayuno. Te lo he preparado yo.

- Goombi. Puaj. Kammy, te diré tres cosas. Primero, yo no desayuno purés. Segundo, ese puré no tiene muy buena pinta. Y tercero, yo ya no como purés. Aunque no se me vean, tengo dientes.

- Kammy. Uh, ¿serás desagradecido? Este puré está perfectamente.

- Goombi. ¿Qué ingredientes lleva?

- Kammy. Pues lo primero que he pillado por la cocina de mi hijo.

- Goombi. Pues si tan rico está, pruébalo tú.

- Kammy. Pues claro que lo voy a probar. (Duda unos instantes)

- Goombi. ¿Quieres dejar de decir “pues” y tomar una cucharadita ya?

- Kammy. (Coge la cuchara y coge un poco del puré. Pone cara de asco sin llegar a probarlo. Devuelve la cuchara al cuenco) Puaj... Esto... Yo no me lo como porque quien se lo tiene que comer eres tú.

- Goombi. ¡Que no quiero!

- Kammy. ¡Que te lo comas, maldito niño! (Goombi se asusta justo en el momento en el que aparece Kamek mágicamente)

- Kamek. ¿Qué pasa aquí?

- Goombi. (Se pone detrás de Kamek, asustado) Kammy me da miedo.

- Kamek. ¿Me lo dices o me lo cuentas? Ya te acostumbrarás.

- Kammy. (Mira a Kamek) Y tú te he dicho muchas veces que busques novia. ¿Acaso piensas dejarme sin descendencia? ¡El linaje de los Magikoopa está en tus manos!

- Kamek. Sí, tranquila. Esta tarde he quedado con la Princesa Peach en su castillo. A las siete viene Super Mario conduciendo una limusina para recogerme.

- Kammy. ¡¿En serio?!

- Kamek. Madre, es una ironía...

- Kammy. ¡Tienes que encontrar a alguien cuanto antes! Cuanto más esperes, peor.

- Kamek. ¿Por qué? Si tengo dinero.

- Kammy. Poquísimo. El castillo va fatal de dinero.

- Kamek. ¿Belleza?

- Kammy. Lo único que se te ve es parte de esa cara de tonto que tienes.

- Kamek. ¿Dignidad?

- Kammy. Eres un mero súbdito del amo Bowser. Nadie en este castillo tiene de eso.

- Kamek. ¡Bueno, pues déjame en paz! (Coge el móvil que tenía en una mesa de madera) Si veis al Gran Hermano Martillo, me hacéis una llamada perdida. ¿Entendido? (Kamek desaparece mágicamente)

_______________________________________________________________

(Tiempo después, Kamek aparece de nuevo en la sala de reuniones con el móvil en la mano. Todo el mundo sigue en sus mismos sitios)

- Guydo. ¿Y ese móvil?

- Kamek. Voy a llamar a gente que conozco para que venga a la fiesta.

- Paratroopi. (Con un yogur en mano y con cuchara en otra) Es buena idea.

- Ratónito. Hala, ¿qué haces con un yogur? ¿De dónde lo has sacado?

- Paratroopi. Siempre guardo uno en mi caparazón por si me entra hambre. (Mira su yogur, medio vacío, y se levanta) Voy a tirarlo.

- Ratónito. Uh, pero si aún queda la mitad. Dámelo a mi.

- Paratroopi. Verás, no me lo como entero porque dice por aquí... (busca una pequeña nota y la lee en alto) “Consumir preferentemente antes de: ver el fondo del envase”. Si llego al fondo puede sentarme mal como dice esto. (Todos miran a Paratroopi cansados)

- Kamek. Cabo Paratroopi, tú no eres más tonto porque no entrenas, ¿verdad?

- Paratroopi. ¿Eh? No entiendo a qué viene eso ahora.

- Kamek. Bueno, en fin. Hagamos como que esto no acaba de pasar... (empieza a marcar un número en su móvil)

_______________________________________________________________

(Comienza la música 1)

- Kamek. (Con móvil cerca de su oído) ¿Hola? ¿Padre Kamek? ¡Hola! Soy tu hijo. Te llamo para invitarte a una fiesta que organizo en el Castillo de Bowser para recordar viejos tiempos. Yo te pago los costes de ida y vuelta. ¿Qué? ¿Qué si está Kammy ahí? Sí... (Kamek padre cuelga) ¿Hola? ¿Hola? Ah...

...............................................................................................................................

- Kamek. Hola, buenos días. Soy Kamek Koopa, amigo de su hijo Ratónito. ¿Es usted Sorprenrata? Ah, bien. Pues llamo para invitarles a una fiesta en este castillo. ¿Qué? ¿Qué si Kammy va a estar ahí? No, tranquila. Además va a haber comida gratis en abundancia.

...............................................................................................................................

- Kamek. ¿Don Huesito? Soy Kamek. Ya sé que estás muy ocupado viajando por el mundo, ¿pero podrías venir al castillo para una fiesta? Ah... Ya veo... ¿Sabes el número de Fuzzya por algún casual? Ya, ya sé que a ti no te contesta, pero mi número de teléfono no lo conoce...

...............................................................................................................................

- Kamek. ¿Fuzzya? ¡Hola Fuzzya! Soy Kamek... (Fuzzya cuelga el móvil) ¿Hola? ¡Ah! Maldita sea...

(Finaliza la música 1)

_______________________________________________________________

(Media hora después, todos siguen en el mismo lugar que antes. Kamek apaga el móvil)

- Ratónito. ¿Ha habido suerte, Kamek?

- Kamek. Más o menos. He conseguido a algunas personas que se unirán a la fiesta.

- Bombazulina. ¡Genial! Y con lo de Kammy, ¿qué vas a hacer? Si aparece por la fiesta se va a armar una buena con Sorprenrata.

- Kamek. Tranquila, la voy a inflar a tranquilizantes.

- Bombazulina. ¿A Sorprenrata?

- Kamek. ¡No! A mi madre. Voy a impedir personalmente que aparezca por la fiesta.

- Guydo. ¿Y si le da algo a tu madre?

- Kamek. Que no... Peores cosas le han pasado.

(Se oye un ruido grande debajo del suelo de la sala de reuniones. Todos pegan un bote del susto)

- Goombilón. ¡¡Ostras!!

- Robert. ¿Qué ha sido eso?

- Bombazulina. (Se pone cerca de Goombilón) Goombilón, tengo miedo...

- Bowser. (Mira el suelo) Parece venir de abajo... (de repente mira al frente con cara de susto) ¡¡¡Mi dinero!!! (Escupe fuego por la boca sin llegar a dar a nadie)

- Kamek. Parece que viene efectivamente de la sala de tesoros del castillo. (Palidece) Maldita sea, seguro que es el Gran Hermano Martillo.

- Ratónito. Qué cobarde se ha vuelto. Ahora entra por la puerta de atrás.

- Bowser. (Se levanta de su asiento real en lo alto de la plataforma) ¡¿Qué hacéis ahí parados?! ¡Id a investigar!

- Ratónito. Disculpe, amo, pero... ¿por qué no va usted? Es su dinero.

- Bowser. Sí, pero parte de ese dinero va a vuestros bolsillos.

- Paratroopi. Poco, poco... Ya podría pagarnos más, amo Bowser.

- Bowser. ¡¿Poco?! Pero si le doy bastante dinero a Kamek para que lo administre. (Todos miran furiosos a Kamek y este se pone nervioso)

- Kamek. ¿E-eh? Bu-bueno... Estamos hablando del asalto del Gran Hermano Martillo en estos momentos... ¿Quién va a investigar? (Nadie levanta la mano. Kamek mira al Trío de Élite) Trío de Élite, gracias por ofreceros voluntarios.

- Trío de Élite. ¡¿Qué?! No, no. Debe de ser un error...

- Robert. Pobrecillos, vamos a acompañarles todos.

- Kamek. Robert, no tienes la palabra.

- Ratónito. Kamek, no seas gallina. ¿Te da miedo ese demente de los martillos?

- Kamek. ¡¡Por supuesto que no!! ¡Vamos todos ahora mismo al sótano!

(Todos salen de la sala de reuniones y se dirigen al sótano)

...............................................................................................................................

(Una vez en el sótano, frente a la puerta que conduce a la sala de tesoros de Bowser se encuentran Kamek, el Trío de Élite, Bowser, Ratónito, Bombazulina, Bowser y Robert agrupados. Todos tiemblan y se miran unos a otros)

- Bowser. Ese sonido parecía de algo cayendo... Tal vez una roca... ¡Sobre mi dinero!

- Kamek. Bueno, no sabemos si el Gran Hermano Martillo está dentro. ¿No creéis que ya habría pasado la sala si fuera él?

- Robert. A lo mejor al ver tanto dinero se ha impresionado.

- Guydo. Cualquiera se impresionaría al ver la sala...

- Ratónito. Bueno, Kamek, si dudas de que si es el demente ese, ¿por qué no entras tú?

- Kamek. ¿Eh? Bueno, yo creo que debe entrar el Trío de Élite, ya que son los de menor rango que hay aquí.

- Goombilón. Siempre igual. Los de menor importancia son los que se comen siempre los problemas.

- Paratroopi. (Guydo y Paratroopi se miran y asienten ambos con la cabeza) Goombilón, creemos que debes entrar e investigar tú.

- Goombilón. ¡¿Perdón?! ¿Y por qué no uno de vosotros dos?

- Guydo. Porque yo soy el Sargento Guydo. Líder del grupo.

- Paratroopi. Y yo un cabo: el Cabo Paratroopi. Tú eres un recluta: el Recluta Goombilón.

- Goombilón. (Dice irónicamente) Qué gusto tener a dos amigos que te valoren y te respeten tanto...

- Guydo. Míralo de este modo: así superarás tus miedos.

- Goombilón. Vamos, con este lío en que me habéis metido no los superaré, me reiré incluso de ellos...

- Paratroopi. ¿Eso es ironía o no? Yo es que no lo reconozco muy bien...

- Kamek. ¡A callar todo el mundo! Tú, Goombilón, ¡métete en la sala y punto en boca, hombre ya! (Todos miran a Kamek, quien está algo confuso por lo que ha dicho) Me siento un poco raro ahora que acabo de decir eso...

- Robert. Kamek, estás loco...

- Kamek. Y tú estás despedido. Ah, no, que necesitamos cuanta más gente mejor...

- Goombilón. Mira, me meto ya en la sala porque no sé que es peor, si encontrarme con el Gran Hermano Martillo o si seguir escuchándoos. (Abre la puerta lentamente. Todo está oscuro. Goombilón se sumerge en una oscuridad no total, pero abundante. Va dando pasos lentamente hasta que pisa unas monedas y se asusta. Al darse cuenta de con qué se ha topado, sigue caminando. De repente, oye varios ruidos y se asusta) ¿Ho... Ho-hola? (Nadie responde) E-estoy muy loco. Muéstrate antes de que te haga daño... (Nadie sigue sin responder) ¡Lo avisé! (Goombilón se abalanza sobre alguien y empiezan ambos a pelear. Ratónito abre la puerta y asoma la cabeza)

- Ratónito. Pero enciende las luces, tonto... (Ratónito da a un interruptor y se encienden todas las antorchas de la sala. Cuando Goombilón ve a su rival, para de pelear. Se trata de Panyo)

- Panyo. Ay... Ay, ay...

- Goombilón. ¡Tú! Te recuerdo. Ya nos hemos visto otras veces.

- Guydo. Es el ladrón de la oscuridad, o algo así.

- Panyo. (Furioso) ¡Ladrón oscuro!

- Bombazulina. ¿Qué haces aquí?

- Panyo. N-nada...

- Bowser. ¡¡Estaba robando mi dinero!! ¡Cogedle, que nos lo llevamos a mi sala real! (Kamek alza su varita y atrapa a Panyo en un cuadrado mágico azul)

...............................................................................................................................

(Un cuarto de hora después, todos menos Kammy y Goombilón se encuentran en la sala real de Bowser. Guydo y Paratroopi sujetan a Panyo para evitar que se escape y el resto observa al ladrón. Bowser tiene cara de confusión)

- Bowser. Ya sé que lo habré dicho antes, pero este tipo me suena de algo.

- Panyo. Bu. Tú también me suenas de algo. ¿Nos hemos visto antes?

- Bowser. Probablemente. ¿Has trabajado para mí alguna vez?

- Panyo. Para nada. ¿Has trabajado para mí alguna vez?

- Bowser. ¡Yo! ¡¿Cómo te atreves, judía miserable?!

- Panyo. (Intenta escaparse, sin conseguirlo) A Panyo, el ladrón oscuro, no le insulta nadie. ¡Nadie!

- Bowser. Uh... Has dicho... ¿Panyo? Ese nombre me suena de algo... En fin. Vas a pagar por lo que has hecho.

- Panyo. Ya veremos... (Panyo consigue soltarse de Paratroopi, empieza a rodear y tocar por todos lados a Guydo y le roba la varita)

- Kamek. ¡No! ¡Que alguien haga algo! (Panyo empieza a lanzar hechizos poco poderosos hacia sus enemigos hasta que llega Robert y se pega a él. Panyo se vuelve morado)

- Panyo. Ugh... Qué mal me siento... (Panyo se dirige a la ventana de la sala y sale despedido por los aires por parte de Robert. Robert permanece en la ventana)

- Robert. Ale, ya está todo solucionado.

- Kamek. (Aplaude) Guao. Ha sido magnífico.

- Bowser. ¿Y mi dinero?

- Robert. (Le enseña varias monedas de oro) Aquí está. (Las tira al suelo y Bowser las coge muy alegre)

- Kamek. Bueno, id todos recibiendo amablemente a la gente que venga a la fiesta, que yo voy a darle la medicaciòn a mi madre. Bueno, el triple de la mediciación, keh heh heh...

- Ratónito. ¿Estás seguro de que eso la retendrá?

- Kamek. Puf, hay tranquilizante suficiente como para dormir al mismísimo Goomboss. Bueno, nos vemos. (Todos menos Bowser abandonan la sala)

_______________________________________________________________

(Varias horas después, Kamek sujeta un vaso con zumo al que le echa el polvo que contienen tres pastillas tranquilizantes. Coge una cuchara y remueve el zumo. A continuación, coge con otra mano otro zumo idéntico y sale de la cocina de su habitación)

- Kamek. Madre, mira lo que te he preparado. Un delicioso zumo de naranja.

- Kammy. No tengo déficit de vitamina C. ¿Quieres causarme una hemorragia o algo para librarte de mi?

- Kamek. No, no. Qué más quisiera yo... Es que con el calor que hace este verano, es necesario hidratarnos.... (deja los dos zumos en la mesa. El zumo con el tranquilizante lo pone del lado de Kammy, y el otro a su lado) ¡Anda! Pero si me he dejado galletas en la cocina para comer. Kammy, vete tomando el zumo en lo que vuelvo. ¿Vale? (Kammy asiente un poco confusa y Kamek se dirige a la cocina)

- Kammy. (Coge el zumo y lo mira. Ve un trozo de polvo aún no disuelto) Puaj. Hay una cosa blanca flotando... (Coge el vaso de Kamek) Este tiene mejor pinta... (Cambia de posición los vasos y se pone a beber. En ese momento llega Kamek)

- Kamek. Eso, muy bien. Tómatelo todo. (Kamek coge el zumo contaminado por el tranquilizante y lo bebe)

_______________________________________________________________

(Esa misma noche, desde una colina hay un Hermano Martillo con unos prismáticos. El Gran Hermano Martillo está a su lado)

- Hermano Martillo. Jefe, ya veo algo.

- GHM. ¿Sí? ¿Y qué ves? ¿Por fin se han quedado solos Kamek y los otros bobos en el castillo?

- Hermano Martillo. Me temo que no... Es más, está viniendo incluso más gente al castillo.

- GHM. ¡¿Qué?! ¡Dame eso! (Le coge los prismáticos y mira. Ve a muchos Koopas, Shy Guys y algunas otras criaturas entrando en el castillo) Bueno, bueno. Esto es increíble. Pero si el otro día vimos a mucha gente saliendo del castillo...

- Hermano Martillo. Pues parece ser que hoy los han repuesto.

- GHM. Espérate un momento. Esto debe de ser una trampa.

- Hermano Martillo. ¿Cómo? ¿Pero la trampa no la habíamos hecho nosotros?

- GHM. Sí, pero ellos nos la han intentado devolver. Seguramente saben que les vigilamos y han intentado mostrarnos que no tienen miedo...

- Hermano Martillo. Entonces... ¿Qué hacemos?

- GHM. Tráeme un papel y un bolígrafo. (El Hermano Martillo hace un gesto de haberlo entendido y se va del lugar)

_______________________________________________________________

(Por la noche, en la habitación del Trío de Élite se está organizando una fiesta con mucha gente. Entre ellos se encuentran los tres secuaces, Ratónito, sus padres y Bombazulina)

- Ratónito. (Mirando el reloj de su muñeca) ¿Dónde estará Kamek? Viene con retraso, ya toda la gente está aquí... (Al estar cerca de la puerta, oye varios golpes y se dirige a ella) ¡Ya voooy! (La abre y queda atónito al ver a Kammy) Ka-Ka-Ka...

- Kammy. ¡¿Qué es todo este ruido?! ¡Es imposible dormir!

- Ratónito. (Mira pálido a Ratorprendido y a Sorprerata, quienes están lejos de él y vuelve a mirar a Kammy) E-eh... ¿Me disculpas un momentito?

- Kammy. ¡No!

- Ratónito. (Sonríe nervioso) Gracias. (Cierra la puerta. A él se acerca el Trío de Élite)

- Guydo. ¿Ocurre algo? ¿Por qué no has dejado entrar al invitado?

- Ratónito. Porque el invitado es Kammy.

- Trío de Élite. ¡¡¿Qué?!!

- Goombilón. ¿Pero qué hace aquí ella?

- Paratroopi. ¿No estaba sedada?

- Ratónito. Esta mujer con tal de dar la guerra se hace inmune a los tranquilizantes...

- Guydo. Pero ábrela, que se va a extrañar... (Ratónito abre a Kammy)

- Kammy. ¡Asqueroso! ¿Cómo te atreves a cerrarme la puerta en las narices, y con esta música tan alta? ¡Tengo un niño intentando dormir en mi habitación!

- Guydo. Ejem, perdone... Querrá decir la de su hijo.

- Kammy. Siempre atacándome de la misma manera. ¡Insensible! (Entra en la fiesta y se pone a mirar a todos lados)

- Paratroopi. Oiga, oiga. No puede entrar. Es una fiesta privada.

- Kammy. ¿Privada? Si la mitad de la gente que hay aquí ni la conocéis. (Ve a Sorprenrata) Uh, ¿y esa impresentable qué hace aquí?

- Ratónito. (Se pone aún más nervioso) Eh... Mejor me voy a ver dónde está Kamek... (Sale de la fiesta)

- Kammy. (Se acerca a Sorprenrata) ¿Qué haces tú aquí, pesada?

- Sorprenrata. Hombre, Kammy Koopa. Cuánto tiempo... (ambas se miran furiosas)

...............................................................................................................................

(En la habitación de Kamek llama Ratónito a la puerta. Goombi coge su varita mágica y abre la puerta con la magia)

- Ratónito. Hola niño. ¿Está Kamek por ahí?

- Goombi. Sí, pero como si no estuviera. Está como ido...

- Ratónito. ¿Cómo? (Entra en la habitación y encuentra a Kamek muy quieto sentado en una silla mirando de cerca la bola mágica que brilla) ¿Kamek? (Kamek gira lentamente la cabeza hacia Ratónito. Kamek tiene la boca un poco abierta y se le cae la baba) Qué pena das...

- Goombi. Yo sabía que los mayores antes o después acaban pegando el bajón, pero no pensaba que lo hicieran tan deprisa...

- Ratónito. (Se acerca a Kamek) ¿Qué demonios te ocurre?

- Kamek. (Mueve lentamente la cabeza haciendo gestos de negación) Hmmpffhmm...

- Ratónito. (Mira al horizonte) Ostras. Ya entiendo por qué Kammy rebosa tanta vitalidad. Kamek, ¿te has tomado los tranquilizantes tú? (Kamek gira lentamente la cabeza y sigue mirando la bola de cristal mágica brillante)

- Goombi. No entiendo. ¿Tan estresante es su vida?

- Ratónito. No. Es que hemos intentado “tranquilizar” a Kammy. Pero no sé qué ha podido pasar... ¡Kamek! Aguanta, que te llevaré al hospital para que te hagan un lavado de estómago.

- Goombi. Pero si no hay nadie en el castillo...

- Ratónito. Rayos, es verdad... Kamek, te va a tocar aguantarte hasta que se te pasen los efectos.

- Goombi. Siempre puedes llevarlo a cuestas hasta las Urgencias Toad, en la otra punta del reino...

- Ratónito. Sí, hombre. En eso estaba yo pensando, ¿no te fastidia? (Ratónito sale de la habitación de Kamek en dirección a la fiesta)

...............................................................................................................................

(Al entrar Ratónito en la habitación de los tres secuaces, encuentra a Kammy y a Sorprenrata peleándose, agarrándose del pelo y tirándose por el suelo)

- Ratónito. ¡Mamá! ¡¿Qué estás haciendo?!

- Guydo. Hemos intentado separarlas, pero no hay manera.

(Aparece Basilix)

- Basilix. Mensaje para Kamek Koopa.

- Ratónito. No está disponible en estos momentos. Dame la carta a mi, que yo le sustituyo. (Basilix le dala carta y Ratónito la lee en alto) “Dejaos de farsas. Mañana por la mañana atacaremos el castillo”. Y firmado por el Gran Hermano Martillo... (Todos palidecen)

- Basilix. ¿Inicio el protocolo de seguridad?

- Ratónito. ¡Por supuesto que sí! De este castillo no entra ni sale nadie hasta que todo se calme. (Basilix se va del lugar) ¡¡Que siga la fiesta!! Ignorad a mi madre y a la madre de Kamek. (Cuando se queda solo, dice para sí mismo) Y yo queriendo ser la mano derecha de Bowser como Kamek... Si son todo complicaciones.

_______________________________________________________________

(Por uno de los pasillos solitarios y oscuros del Castillo de Bowser camina Spiriny muy apresurado)

- Spiriny. (Dice en voz baja) Ah... ¿Será posible que me haya dejado una maleta en mi habitación? La cojo y me marcho de nuevo de este castillo... (Spiriny llega a la puerta de su habitación y saca las llaves. Aparece de repente Basilix)

- Basilix. ¡¡Identifíquese!!

- Spiriny. (No puede ver bien a Basilix en la oscuridad y le confunde) ¡Ostras! ¡El Gran Hermano Martillo!

- Basilix. ¡Intruso! ¡Hay un intruso no identificado en el castillo! (Sus ojos rojos empiezan a brillar y lanza un rayo que petrifica al instante a Spiriny. Aparece Ratónito de repente)

- Ratónito. ¿Qué está pasando aquí? (Da un botón y enciende las luces. Ve a Basilix y lejos de él a Spiriny petrificado) ¡¡¿Qué has hecho?!!

- Basilix. Se nos ha colado un intruso y le he parado los pies.

- Ratónito. ¡Pero si es Spiriny! Es uno de los trabajadores de este castillo, pedazo de memo. ¡Despetrifícale ya!

- Basilix. Lo siento, pero sólo puedo hacerlo con el consentimiento de Kamek.

- Ratónito. ¡No puedo conseguirte ese permiso! Kamek está en otro planeta en estos momentos.

- Basilix. Pues no despetrifico a nadie.

- Ratónito. Por el amo Bowser, este castillo me va a dar un ataque al corazón. (Le coge la cabeza) ¡Hazlo ya!

- Basilix. (Saca de sus puños unas cuchillas que rozan ligeramente en cuello de Ratónito) Suéltame o te petrifico a ti también. (Ratónito le suelta lentamente, muy asustado)

- Ratónito. Esto ha ido demasiado lejos. (Se da la vuelta y se dirige a la fiesta)

...............................................................................................................................

(Cuando Ratónito vuelve a la habitación del Trío de Élite, empieza a echar a la gente de la fiesta con muchos gritos. El resto de secuaces de Bowser le miran confusos)

- Bombazulina. Ratónito, ¿qué estás haciendo?

- Ratónito. Dije esta mañana que tenía dos planes, por si uno fracasaba. Pues bien, este ha fracasado. El Gran Hermano Martillo aún no se da por vencido, Kamek está en su habitación inflado a tranquilizantes y tenemos a Spiriny petrificado en mitad del pasillo. (Todos se miran unos a otros confusos) Pero yo por una vez tengo la solución definitiva.

- Robert. ¿Qué piensas hacer?

- Ratónito. El demente y los suyos van a entrar a este castillo y van a sufrir el peor rato de sus vidas.

- Robert. ¿Cómo? Ellos son muchísimos. Y nosotros unos poquitos.

- Ratónito. Aunque sean muchísimos, lo que les une es la moral. Creen que pueden vencernos. Vamos a darles su propia medicina con el dicho: “divide y vencerás”. Si conseguimos hundirles la moral, vencerlos será pan comido.

- Guydo. Ya, ¿y cómo piensas bajarles la moral?

- Ratónito. Con el miedo. Vamos a convertir este castillo en algo parecido a una Mansión Boo. Van a ocurrir cosas extrañas durante su presencia.

- Bombazulina. ¿Ya estamos otra vez con las ganas de convertir este castillo en un pasaje del terror? No me digas que vas a utilizar el tema ese del robot fantasma del futuro ese... ¿no?

- Ratónito. No, no. No hará falta. Lo que vamos a hacer es darles miedo con cosas sorprendentes, que ocurran cuando menos se lo esperen. Además, ya no hay tiempo para echarse atrás, porque no hay ningún otro plan, ¿verdad? (Mira a todo el mundo y nadie responde) ¡Perfecto! Ahora os contaré lo que necesito. Primero, un Chomp Cadenas.

- Goombilón. ¿Un Chomp? ¿Sólo? (Dice irónicamente) Qué miedo les vas a dar...

- Ratónito. Si le aplicamos un hechizo determinado, se volverá temible.

- Guydo. Eh... ¿No estaba drogado o algo así?

- Ratónito. Sí, pero aquí no sólo él sabe magia... Je, je...

_______________________________________________________________

(A la mañana siguiente, se encuentran en la habitación de Kamek, el Magikoopa, Bowser, Goombi, Robert, el Trío de Élite, Ratónito y Bombazulina. Kamek mira por la ventana, aún bajo los efectos de los tranquilizantes)

- Bombazulina. Parece que Kamek va recuperando los reflejos... Va a mejor.

- Robert. (Mirado por la ventana) Ratónito, el Gran Hermano Martillo y sus esbirros se están acercando al castillo.

- Ratónito. Perfecto. No vamos a oponer resistencia. (Todos miran a Ratónito confusos de nuevo)

- Paratroopi. ¿Te has vuelto loco o qué?

- Ratónito. No. La trampa se encuentra dentro de este castillo. En cuanto abran las puertas y entren, Paratroopi y Robert, cerradlas lo más rápido que podáis. Entonces la verdadera fiesta empezará... ¡Mujajaja!

(Paratroopi y Robert salen volando por la ventana de la habitación)

...............................................................................................................................

(Un cuarto de hora después, el Gran Hermano Martillo y su equipo formado por casi un centenar de Hermanos Martillo llegan a la puerta de entrada del castillo. El Gran Hermano Martillo se da la vuelta y mira a los suyos)

- GHM. Hermanos, hermanas... Hoy es uno de los días que la historia de este reino recordará durante los próximos siglos. ¡Vamos a derrocar a Bowser y conquistar este castillo!

- Todos. ¡Hurra!

- GHM. ¡Y después iremos a por Mario y los suyos!

- Todos. ¡¡Hurra!!

- GHM. ¡¡Y después de hacernos con el control del Reino Champiñón iremos a por los lugares de alrededor!!

- Todos. ¡¡Hurra!! ¡Hip, hip, ¡hurra!!

(El Gran Hermano Martillo saca dos martillos de hierro y golpea la puerta de entrada al Castillo de Bowser. Esta se abre de cuajo y todos los Hermanos Martillo entran dentro. Todos se paran al entrar)

- GHM. Hay que andar con cuidado. Todo parece tranquilo... Demasiado tranquilo... (Paratroopi y Robert aparecen por detrás y cierran las puertas del castillo. Colocan un candado gigante para evitar que se vuelva a abrir la puerta. Todos los Hermanos Martillo se acumulan en la puerta)

- Hermano Martillo 1. ¿Nos han encerrado?

- Hermano Martillo 2. Ayy... A ver qué va a pasar...

- GHM. ¡Todos tranquilos! No pueden hacer nada contra todos nosotros... (Mira a su alrededor y ve cómo las ventanas se van taponando con barrotes de hierro) ¿Por qué nos querrán encerrar...? (Se apagan las luces de repente y todos los Hermanos Martillo se asustan) ¡Callaos de una vez! Si apagan las luces estamos en las mismas. Ellos tampoco podrán ver... ¡Subamos a los pisos superiores! Nada más dar un paso, se enciende una luz al final del pasillo. Todo el mundo mira la luz con miedo)

- Hermano Martillo 3. Yo esto no lo veo...

- Hermano Martillo 4. No pienso esperar a que ocurre algo. ¡Yo me marcho!

- GHM. ¡¿Pero qué bobadas estáis diciendo?! ¡No han hecho nada y ya estáis lloriqueando! (Se oyen ladridos) No os preocupéis. Será un Chomp inofensivo... (justo donde está la luz cae un trozo de carne gigante)

- Hermano Martillo 5. ¿Pe-pero qué tamaño tienes ese Chomp “inofensivo”?

(Aparece debajo de la luz un Chomp Tiburón que empieza a masticar la comida. Cuando ha acabado, empieza a mirar a todos lados y a ladrar fuertemente)

- GHM. (Muy nervioso) Shhh... No habléis. En la oscuridad no puede vernos... (se encienden de repente las luces y todos los Hermanos Martillo miran paralizados por el miedo al Chomp Tiburón. El Chomp Tiburón ladra y empieza a perseguir a los Hermanos Martillo. Varios de ellos consiguen escapar, incluido el Gran Hermano Martillo, y suben a la planta primera)

...............................................................................................................................

(La primera planta del castillo. Todo está muy tranquilo. El GHM y los suyos ven al fondo del pasillo a Spiriny petrificado)

- Hermano Martillo 6. ¿Será otra trampa?

- GHM. No sé... (Aparece detrás de ellos Basilix)

- Basilix. ¡¡Intrusos!! (Todos se dan la vuelta asustados. El GHM golpea inconscientemente con uno de sus martillos a Basilix mientras se gira. Basilix cae al suelo, pero se levanta) E-estoy bien... (El Gran Hermano Martillo le golpea con el otro martillo en la barriga y sale disparado por los aires, no sin romper antes la pared del castillo)

- GHM. ¡Mujajajaja! (Grita mirando al techo) ¡¡Kamek, tienes las horas contadas!!

...............................................................................................................................

(Mientras tanto, en la habitación de Kamek todos están nerviosos)

- Paratroopi. Ay... Ya viene...

- Goombi. Tengo miedo.

- Ratónito. Tenemos que conseguir algo que les asuste de verdad. Algo que sea peor que todo lo que acaban de vivir hace unos momentos... (en ese momento sale Kammy)

- Kammy. (En su cabeza sigue llevando en gorro morado, pero de cabeza para abajo tiene el cuerpo al descubierto, excepto varias partes que tapan un bañador y un bikini morados) Me voy a la piscina. Ya que la ha abierto mi hijo, habrá que aprovecharla. (Todos al ver a Kammy con tan poca ropa ponen cara de susto)

- Goombilón. ¡Ah! ¡Madre mía, vaya imagen!

- Guydo. Creo que voy a echar el desayuno...

- Ratónito. ¡Esto! ¡Esto es lo que necesito para derrotar a ese demente y a los suyos! (Se acerca a Kammy) Kammy, por favor. Sal de aquí y baja las escaleras para llegar a la piscina.

- Kammy. Pues claro que voy a bajar por las escaleras. ¿Cómo si no voy a llegar? ¿Eres tonto? (Kammy sale con el gorro de siempre y el bikini morados y con una toalla de baño en mano)

...............................................................................................................................

(Por otra parte, el Gran Hermano Martillo y los pocos que quedan de los suyos siguen subiendo escaleras)

- GHM. (Con cara de loco) Mujajaja... Allá vamos... (Al llegar a la tercera planta, se topan con Kammy en mitad del pasillo. Cuando todos los Hermano Martillo, incluído su líder, ven a Kammy en bañador, empiezan a asustarse) Madre mía...

- Hermano Martillo 2. ¡Ahh! ¡Mis ojos! (Se tapa los ojos)

- Hermano Martillo 5. ¡Me he quedado ciego! ¡¡Socorro!!

- GHM. (Con los ojos parcialmente tapados) Creo que estoy viendo a Kammy...

- Kammy. Pues yo creo que estoy viendo a un grupo de idiotas. ¿Qué hacéis aquí?

- GHM. Soy el Gran Hermano Martillo. ¿No me recuerdas?

- Kammy. Ah, sí. Eres el chalado ese... La rata vaga y los otros te están esperando. Pero a ti solo... (alza la varita y crea un agujero negro pequeño que absorve a todos los Hermanos Martillo que quedan menos el Gran Hermano Martillo) Ale, adelante... (Kammy se dirige hacia las escaleras y el Gran Hermano Martillo hacia la habitación de Kamek)

...............................................................................................................................

(20 segundos después, en la habitación de Kamek...)

- Robert. Oye, ¿soy yo el único que no ve normal lo que está pasando? Porque me estoy preocupando.

- Goombilón. ¿A qué te refieres?

- Robert. A todo, en general... Desde que vine aquí no he visto más que cosas raras. ¿Esto pasa en otros lugares del reino?

- Ratónito. (Ignorando a Robert) Esta Kammy está cada vez peor. ¿No ha acabado con el Gran Hermano Martillo? (El Gran Hermano Martillo abre las puertas de cuajo con un golpe de su martillo)

- GHM. No. Claro que no. (Todos le miran asustados)

- Ratónito. N-no te tenemos mi-miedo... (empieza a mirar a sus compañeros) Somos siete contra uno.

- GHM. Bah, siete bobos no son nada para mí. Observad... (saca de su bolsillo una Estrella)

- Guydo. Bah, no nos das miedo. Sólo Mario y sus compañeros pueden usar ese tipo de poderes.

- GHM. Eso era antes. He estado haciendo numerosas investigaciones... Y tengo la clave para aprovechar este poder.

- Bombazulina. ¡¿En serio?! ¿Y cuál es?

- GHM. A vosotros os lo iba a decir... Prometo que se lo diré al último que quede con vida, justo antes de que le mate con mis propias manos... ¡Este es el fin del Castillo de Bowser!  (Sostiene con fuerza la Estrella. De repente, esta se convierte en un conjunto de brillos que se introducen por su mano y que se extienden por todo su cuerpo)

- Paratroopi. Esto no puede estar pasando...

- GHM. ¡Admirad al Gran Hermano Martillo invencible!

- Ratónito. Invencible por un tiempo. Si alguno conseguimos sobrevivir todavía podemos pararte los pies...

- GHM. (Desaparece del lugar y se teletransporta al lado de Ratónito) No lo creo, jeje... (Le golpea con uno de sus martillos y le tira al suelo. Al verlo el resto se asusta)

- Guydo. ¿A qué esperáis? ¡Vamos a luchar por lo que es nuestro!

- Paratroopi. ¡Eso es! Si este castillo se va, al menos se irá con todos nosotros.

- Goombilón. Bueno, no con todos, porque gran parte se ha marchado... Pero... ¡al ataque! (Todos menos Guydo corren hacia el Gran Hermano Martillo. Guydo saca su Lanzabills Bala y le da al botón para que crezca)

- GHM. (Salta hacia el techo, pone las manos en él y se impulsa hacia abajo. Cae encima de Goombi y le aplasta. Paratroopi se acerca y le pega un puñetazo en la cara, pero el GHM lo resiste sin problemas y Paratroopi se mira su mano) Jajaja. Ni siquiera ha sido una caricia eso para mi.

- Paratroopi. (Se mira su mano, que está roja) ¡Ahh...! Cómo me quema la mano. Ese tío está ardiendo...

- GHM. (Se acerca rápidamente a Paratroopi y prepara sus dos martillos de hierro) Te haré picadillo. (Bombazulina aparece detrás suya y crece en tamaño)

- Bombazulina. ¡Adelante, bomba de humo! (Bombazulina explota y expulsa mucho humo, que invade toda la sala. No se puede ver nada. Los pedazos de Bombazulina se van agrupando de nuevo como si se tratara de un Huesitos)

- GHM. ¿Creéis que el no poder ver me va a impedir derrotaros? (Empieza a lanzar martillos dorados por todos lados. Se escuchan gritos de dolor por todos lados) ¡Mujajajaja! (Cuando se disipa el humo, se puede ver a Guydo montado en su Lanzabills Banzai)

- Guydo. Se te ha acabado el juego, maldito traidor. Este Bill Banzai no te va a causar rasguños, te va a destrozar por completo. Eso espero... Más me vale... Oye, espera. ¿Y el amo Bowser? Hace tiempo que no le veo. Bueno, da igual. Yo voy a acabar contigo.

- GHM. ¿Tú te callas alguna vez?

- Guydo. ¡YO soy el que te va a callar a ti! (Dispara un Bill Banzai hacia el GHM y este impacta contra él. El GHM se rie después de haber partido por la mitad la bala con su propio cuerpo. Guydo está muy pálido, más que su máscara)

- GHM. ¿Has terminado? Genial. Ahora me toca a mí. (Corre hacia el Lanzabills Banzai para destrozarlo, pero en ese momento irrumpe Bowser. Bowser le da un puñetazo al GHM en pleno movimiento y desvía su dirección)

- Guydo. ¡¡Amo Bowser!! ¡Muchas gracias por salvarme!

- Bowser. De gracias nada. Ya te cobraré una multa por obligarme a salvarte.

- Guydo. Bueno, mientras sobrevivamos, ya veremos... (El Gran Hermano Martillo aparece caminando lentamente. Ya no posee el poder de la Estrella)

- GHM. Condenado Koopa...

- Bowser. (Riéndose) Hola a ti también, Gran Hermano Martillo.

- Guydo. Estás acabado. Bowser te aplastará como a un débil Goomba.

- GHM. No lo creo. (Saca un saco y lo vacía. Dentro de él hay Champiñones, Flores de Fuego, Limas Ácidas, Flores de Hielo... Guydo se pone nervioso de nuevo) Tengo súperpoderes para luchar un buen rato. Bowser, si Mario ha podido derrotarte sin ningún poder, ¿no podré yo con todo esto?

- Bowser. Te vas a arrepentir en cuanto te derrote...

- GHM. Eso es lo que ha llevado a tu castillo a la ruina, tu orgullo, tu superioridad. No has sido un buen amo, ya lo estás viendo. Pero yo llevaré este castillo y a los míos a una victoria tanto merecida como posible. Y nada, ¡nada!, podrá detenerme, ¿me oyes? Ni tú ni todo un ejército de secuaces tuyos.

(Aparece Kammy con mal humor y en bañador)

- Kammy. ¡¿Desde cuándo habéis cerrado la piscina?! Hay un letrero que dice: “cerrada por próxima invasión”.

- GHM. ¡¡Ostras!! (Se tapa los ojos)

- Guydo. ¡Amo Bowser, dese prisa!

- Bowser. Que ya voy... (escupe fuego y quema por completo al Gran Hermano Martillo. Aparecen Robert y Goombi)

- Robert. Rápido, niño. Crea un caldero de lava. (Goombi coge su varita mágica e invoca un caldero lleno de lava. Robert toca al Gran Hermano Martillo y este se vuelve morado)

- GHM. Uh, ¡¿qué me está pasando?!

- Robert. Nada, tú relájate. Que el viaje que te espera es muyyy largo. (Robert eleva al morado Gran Hermano Martillo hasta encima del caldero y lo suelta)

- GHM. (Flotando en la lava) ¡¡Nooo!! ¡¡Me las pagaréis!! ¡¡Me las pag...!! (El Gran Hermano Martillo se sumerge en la lava. Todos se quedan relativamente tranquilos)

- Guydo. (Mira por todos lados) Esto... ¿Y ahora qué hacemos?

_______________________________________________________________

(Varios días después, todos los que se habían ido del castillo han vuelto. Todo el castillo se encuentra en el cementerio del Reino Champiñón contemplando una lápida con forma de un caparazón. Kamek se coloca en frente de un micrófono mirando a todo el mundo)

- Kamek. Esbirros, compañeros, amo Bowser... Hace unos días ha ocurrido uno de los sucesos que marcan un antes y un después en el Castillo de Bowser. Y no es porque vosotros, malditos traidores, hayáis abandonado el castillo en su peor momento, sino porque hemos conseguido lo que hemos buscado durante un año. Eso es: derrotar al Gran Hermano Martillo. (La gente empieza a hablar)

- Korokoopa. ¿En serio habéis acabado con él?

- Kamek. En efecto. Yo y otros más lo hemos visto con nuestros propios ojos.

- Popkey. Ya veréis lo pronto que vuelve de entre los “muertos”...

- Kamek. Popkey, ni se te ocurra pensarlo. Esto está acabado, y punto en boca. Además, nos hemos reunido aquí para darle el último adiós al Paratroopa azul de las gafas cuuyo nombre no sabemos.

- Korokoopa. ¿Qué último adiós ni qué último adiós? Ese tío intento derribar nuestro castillo con explosivos una vez.

- Ratónito. Y a mi me intentó matar.

- Kamek. Bueno, pues nada. ¡No hay último adiós, por pesados!

- Guydo. Oye, ¿y qué fue de Spiriny? ¿Se recuperó?

- Kamek. Ehmmm... No. (Mira a todo el mundo) Contratamos a un guardaespaldas y este creyó que Spiriny era un intruso... Y lo petrificó con sus poderes. Según me han contado, salió disparado por los aires, y como Spiriny sigue petrificado, eso significa que sigue vivo y no en coma. Varios Helibotes le están buscando por todo el reino... (Todo el mundo pone cara de preocupación por Spiriny)

- Kaproopa. Y lo dice tan tranquilo... Madre mía...

- Kamek. Bueno, visto que no mostráis más interés por este Paratroopa, sacaremos varias botellas con champán para celebrar la muerte por fin del Gran Hermano Martillo.

- Korokoopa, Popkey y Kaproopa. ¿En serio?

- Kamek. Sí, pero sólo los valientes que se quedaron en el castillo. ¿Qué os creíais, que somos tontos? (Boos con pajaritas empiezan a repartir copas a varias personas)


[]

(Varias horas después, el Castillo de Bowser vuelve a la normalidad. Kamek, Bombazulina y el Trío de Élite se encuentran reunidos en la habitación del Magikoopa)

- Kamek. Me siento realmente orgulloso de tener unos secuaces que puedan luchar con tal valentía. Seguro que dentro de un tiempo podremos derrotar a Mario, lo presiento.

- Bombazulina. Ya, eh... ¿Por eso nos has convocado?

- Kamek. No, es que quería decirte a ti, Bombazulina, que ya no tienes que preocuparte por sustituir a Fuzzya en su trabajo. He encontrado a alguien que haga su trabajo de contable. De hecho se está instalando en la habitación de los Hermanos Koopa porque me han comunicado que por aquí no vuelven, que regresan a su castillo.

- Bombazulina. ¿Y el Trío de Élite qué tiene que ver con esto?

- Guydo. Nada, pero como queremos enterarnos de todo lo que pasa en este castillo, cotilleamos. ¿Verdad? (Paratroopi y Goombilón asienten)

- Bombazulina. Oye, pues vamos a darle la bienvenida, ¿no?

- Kamek. Id, que seguro que está en su casa.

(Bombazulina y el Trío de Élite salen de la habitación de Kamek)

...............................................................................................................................

(Los cuatro se dirigen a la puerta de la antigua habitación de los Hermanos Koopa y llaman al timbre. Aproximadamente diez segundos después, abre la puerta quien los sustituye)

- Bombazulina. Ho... (Ve a quien ha abierto la puerta y se queda boquiabierta, al igual que el Trío de Élite) la... ¿Bi-bienvenido?

- Goombilón. (Con los ojos bien abiertos) Madre mía, ¿pero a quién ha contratado el jefe Kamek?

- Paratroopi. Oye, a mi me suena de algo. ¿No le hemos visto antes?

- Guydo. Voy a contárselo a todo el mundo. ¡Esto nadie se lo puede perder!

(Guydo sale corriendo. Un día está acabando en el Reino Champiñón como muchos otros y como muchos futuros)

En el próximo episodio... (Una nueva compañera, una casa embrujada y un Chomp atrincherado)[]

(En la sala de reuniones del castillo, todos los personajes menos Rita-disc y Robert están reunidos...)

- Kamek. En primer lugar, os mostraré a Spiriny... (Alza la mano a su izquierda, donde se encuentra el Spiriny petrificado)

- Goombilón. Kamek, ¿sabes algo sobre eso de las petrificaciones?

- Kamek. Por lo que he leído, la víctima puede sobrevivir hasta un año. Es bastante para encontrar a ese Basilix. Hasta que no desaparezca el hechizo, Spiriny no podrá sentir nada. Es como si estuviera en coma. Ahora mismo hay equipos de Helibotes rastreando el reino.

_______________________________________________________________

(En la habitación de Rita-disc...)

- Korokoopa. Te queríamos preguntar por qué no has asistido a la reunión.

- ??? (nueva compañera). Ah, bueno. Es que con la mudanza y todo estaba muy cansada. A la próxima voy sin falta.

(Fuera de la habitación...)

- Ratónito. Oye, se me ha ocurrido algo para que esa chica supere ese miedo que uno tiene al principio cuando llega a un nuevo lugar.

- Korokoopa. ¿Qué se te ha pasado por la cabeza, Ratónito?

- Ratónito. Darle un buen susto.

- Goombilón. Osea, que para que pierda el miedo, ¿pretendéis darle miedo? No sé...

_______________________________________________________________

(Cuando Kamek y Kammy llegan a la habitación de Kamek, los Magikoopas encuentran a un Merodeaguy golpeando la puerta de su habitación)

- Kammy. Oye, que esa no es tu casa. ¿Qué crees que estás haciendo?

- Merodeaguy. Es que se me ha escapado mi mascota Chomp y se ha metido en esta habitación... (Pone cara de susto) ¡No me digan que es su habitación!

- Kamek. (Pone cara de susto) ¡Pues sí! (Se acerca a la puerta y empuja al Merodeaguy) ¡Ay! ¡Goombi tiene que estar dentro! ¡¡Goombi!! ¡¿Estás bien?!

(Dentro de la habitación, se oyen muchos ladridos del Chomp Cadenas)

- Goombi. ¡Sí, estoy bien! Me he subido a lo alto de un armario, donde no puede llegar esa bestia. ¡Es muy agresiva!

...............................................................................................................................

(Kamek mira a Guydo y a Paratroopi)

- Kamek. Necesito que me traigáis un Fuzzy. En este castillo hay unos pocos escondidos.

­­_______________________________________________________________

(En la habitación de la nueva compañera...)

- ??? (nueva compañera). Ahh... Por fin en casa... (se mete en la habitación y ve todas las luces encendidas) Uh, ¿pero no las había apagado al salir? Qué despistada estoy... (cuando da unos pasos, se van apagado a cada paso que da) Pe-pero... ¿Uh? (Mira por todos lados) Esto debe de ser un problema de electricidad.

- Ratónito. (Dice en tono muy bajo, escondido donde la nueva compañera no puede verle) Buu...


- ??? (nueva compañera). (Korokoopa cierra la puerta por detrás y se apagan todas las luces de repente) ¡¡Aaaahhh!! ¡Socorro! ¡Que alguien me ayude!

Curiosidades[]

  • En una de las escenas hablan el Gran Hermano Martillo y el Sargento Guydo brevemente:

- GHM. ¿Tú te callas alguna vez?

- Guydo. ¡YO soy el que te va a callar a ti!

Una frase bastante parecida le dijo Semi-Súper Mecha-Sonic al Áxem Ranger Rojo en el sexto episodio de Super Mario Bros. Z, después de que el casi invencible robot hubiera destruido a sus cuatro hermanos.

Cartel

¿Te ha gustado este episodio? Puedes volver a la página principal de Los Tres Secuaces haciendo clic aquí. O también puedes ver el siguiente capítulo aquí.

Advertisement